Hoy viajamos hasta Málaga para contaros la boda de Ana y Pablo. Se conocieron hace 3 años, en Navidad. Solo necesitaron tres citas para saber que serían inseparables y en febrero empezaron a salir. Una noche de octubre del pasado año, Pablo sorprendió a Ana con un viaje fugaz a Gante; allí en uno de esospuentes maravillosos, de repente se arrodilló y le pidió matrimonio.¡Ahí empezó todo!
“¡Teníamos todo tan claro, que no queríamos estar meses y meses organizando la boda, y que mejor mes para casarnos, que el mes del amor y del que surgió nuestro amor! 90 días más tarde, el 3 de febrero de 2018 sería la gran cita por la mañana, en la Iglesia de nuestro barrio, la Iglesia de San Gabriel de la Malagueta (Málaga)”
La celebración posterior fue en la Hacienda de las Fuentes.
Ana llevó un vestido muy especial, pues fue confeccionado por su madre. “En varias tardes elegimos las diferentes telas, y el diseño fue saliendo poco a poco de nuestras cabezas…al ser mi madre, me permitió todo, así que diseñe un vestido de novia compuesto de tres piezas sencillas decoradas con lazo estrecho de terciopelo en color verde olivo: para la Iglesia y coctel llevaría falda de raso de seda con botones delanteros y cola fija de 3 metros, cuerpo de la misma tela con escote y mangas de plumeti de seda, un velo de 4 metros de tul y una estola en color marfil; posteriormente para la fiesta, me hizo una blusa de seda natural a la que le cosió flores bordadas en tonos verdes, celeste, marfil y negro, y para adornar la coleta me diseñó un tocado en porcelana fría en esas mismas tonalidades”
El maquillaje estuvo en manos de Chabeli, una de las mejores amigas de Ana.
Pablo llevó un chaqué a medida de Mangas. Los gemelos eran de plata, con las iniciales de la novia.
Ana me cuenta lo especial que fue la ceremonia, pues la ofició uno de los amigos de la infancia de Pablo. Ana llegó puntual a su cita acompañada de sus pajes vestidos en tonos gris y verde. Entró a la iglesia al ritmo de River Flows in You de Yiruma y al llegar al altar se fundió en un abrazo con Pablo.
Los novios tenían el estilo de su boda muy claro: querían una boda llena de color verde, muy andaluza y llena de detalles. Como ya habéis podido leer la familia de Ana se identifica mucho con la costura, por ello el sitting fueron nombres de diseñadores de moda con sus bocetos y una máquina de coser. Una de las mesas llevaba el nombre de la madre de Ana con el boceto de su vestido de novia.
Su entrada al banquete fue bailando con “Don´t stop me now” de Queen, poniendo en pie a todos sus invitados. El ramo lo dividió en 4 partes, y lo entregó a 3 primas y a una amiga.
Abrieron el baile con Stand by me justo después de que sus fotógrafos Sweet Studio y sus videógrafos Focal 35 realizan un video de los momentos más emocionantes del día. Después la fiesta continuó al ritmo de Mister Proper, un grupo malagueño de música pop en español.
B.
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